Optimización de la eficacia institucional

Satisfacer una mayor demanda de servicios del Organismo supone mejorar la productividad y la agilidad de los procesos administrativos en los que se sustenta la ejecución eficiente y eficaz de los programas a favor de los Estados Miembros. En este contexto, el objetivo de las gestiones ha sido aprovechar la tecnología para optimizar los procesos, desarrollar las competencias del personal en ámbitos como la inteligencia artificial (IA) y mejorar las capacidades de adquisición. Además, sigue siendo importante ampliar la comunicación y la divulgación multilingües.

Las iniciativas en curso dirigidas a reforzar el compromiso del personal fomentando un entorno laboral propicio se centraron en el desarrollo profesional, la conducta ética y el bienestar físico y mental de toda la plantilla. También se alcanzó un hito importante cuando se logró la paridad de género entre los empleados que ocupaban puestos profesionales y el personal directivo superior.

Se logró un hito cuando, en funciones del cuadro orgánico y del personal directivo superior, se alcanzó una representación de 50 % de mujeres y 50 % de hombres, objetivo establecido por el Director General cuando asumió el cargo en 2019 y la representación de las mujeres en la Secretaría era del 30 %.

Gestión orientada a los resultados

El Organismo perseveró en su empe?o por fortalecer su gestión basada en los resultados (GBR) a fin de mejorar la claridad y la coherencia de los dise?os de los programas en toda la organización. Con este objetivo, el Grupo de Coordinación en materia de GBR, de ámbito interdepartamental, ayuda a coordinar y dar efecto a la GBR y garantizar su calidad en todo el ciclo de programas. En 2024, el Organismo preparó el proyecto de programa y presupuesto para 2026-2027, basado en las ense?anzas extraídas en bienios anteriores y en diversas revisiones y evaluaciones, así como en la evaluación interna y externa. El Organismo perseveró en su labor de mejora de su sistema y sus procesos de gestión del riesgo durante el ciclo completo de programas y de apoyo a la rendición de cuentas y la toma de decisiones. Asimismo, incorporó sistemáticamente cuestiones transversales en todas las fases del ciclo de la GBR.

Los indicadores de ejecución se siguieron perfeccionando para medir la ejecución de los programas. Por ejemplo, se examinaron las mediciones de los indicadores de ejecución, incluidos los valores de referencia, las metas y los medios de verificación, para determinar la ejecución de los programas y presentar informes significativos a los Estados Miembros. Además, a fin de fortalecer la supervisión del desempe?o, se llevó a cabo un ejercicio de examen interno específico de mitad de período en el que se usaron indicadores de ejecución para registrar los resultados reales en función de los resultados previstos. Con objeto de evaluar la repercusión de sus actividades en los Estados Miembros, el Organismo siguió extrayendo análisis de las pruebas de conocimientos y las encuestas de seguimiento de los participantes para medir mejor y más oportunamente los resultados en materia de creación de capacidad.

El Organismo sigue colaborando con el sistema de las Naciones Unidas y con otros agentes internacionales, en particular por medio de la Red de Planificación Estratégica de las Naciones Unidas (UNSPN) y la Comunidad de Resultados del Comité de Asistencia para el Desarrollo de la OCDE, con miras a contribuir constantemente a las mejores prácticas en la aplicación de la GBR y aprender de ellas a fin de obtener mejores resultados.

Innovación y agilidad

El aumento en el uso de servicios y herramientas de TI avanzados mejora tanto la eficiencia como la eficacia en todo el Organismo, racionalizando los procesos y posibilitando una gestión de las operaciones basada en los datos. En 2024, el Departamento de Administración:
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• Introdujo soluciones y plataformas de TI mejoradas de apoyo a los departamentos técnicos, por ejemplo, aprovechando herramientas de IA como los grandes modelos lingüísticos para la traducción y la automatización robotizada de los procesos en las finanzas. Se inauguraron portales en línea para facilitar la ejecución de programas clave y el intercambio de información.
• Favoreció una innovación más rápida aumentando un 48 % el número de funcionarios capacitados en herramientas y tecnologías de la información, e impartió capacitación a más de 500 empleados sobre las técnicas de análisis de datos para potenciar la productividad y la eficiencia.
• Siguió centrándose con claridad en la seguridad de la información para responder a la dependencia cada vez mayor de la TI y a la complejidad creciente de las amenazas sufridas por esta. El Organismo también siguió avanzando en la protección de la infraestructura informática que monitorea y detecta los riesgos de seguridad de la TI y de la información y les da respuesta. Asimismo, mantuvo la certificación ISO/IEC 27001 de su sistema de seguridad de la información, que exige altos niveles de cumplimiento.
• Implantó un nuevo procedimiento acelerado de adquisición de emergencia que mejora considerablemente la capacidad del Organismo de adquirir y entregar con rapidez equipos que salvan vidas. Ello permitió prestar ayuda con diligencia en situaciones críticas en Ucrania, así como en otras respuestas de emergencia como las de Cuba, Granada, Honduras, la República árabe Siria y Türkiye.
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Alianzas y movilización de recursos

El Organismo siguió prestando apoyo a los Estados Miembros, entre otras cosas mediante iniciativas emblemáticas centradas en ámbitos clave de las aplicaciones de la ciencia y la tecnología nucleares. Se hace especial hincapié en esferas como la atención oncológica, la inocuidad y la seguridad alimentarias, la prevención de enfermedades, la protección de los océanos y las mujeres en el ámbito nuclear, por medio de las iniciativas Rayos de Esperanza, Atoms4Food, ZODIAC, NUTEC Plastics, el Programa de Becas del OIEA Marie Sk?odowska-Curie y el Programa Lise Meitner, y en el marco de la ayuda a Ucrania.

El Organismo amplía continuamente su colaboración estratégica con el sistema de las Naciones Unidas y otras organizaciones internacionales. Por ejemplo, la cooperación con el Grupo de Gestión Ambiental de las Naciones Unidas, resultó decisiva para aumentar la divulgación y la visibilidad y facilitar la ejecución de las actividades de los programas relacionadas con la contaminación marina, en concreto las que abordan la contaminación del mar por microplásticos y la acidificación de los océanos. La estrecha colaboración con la Organización Mundial de la Salud (OMS) dio lugar a una publicación conjunta sobre la gestión sostenible de las instalaciones y equipos de radioterapia. La alianza fue importante para que no hubiera solapamientos entre las necesidades de los Estados Miembros atendidas por el Organismo y las que atiende la OMS. La alianza entre la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO) y el Organismo se amplió más allá del Centro Conjunto FAO/OIEA de Técnicas Nucleares en la Alimentación y la Agricultura mediante una iniciativa conjunta, Atoms4Food, que aspira a ayudar a los Estados Miembros en su labor de lucha contra el aumento del hambre e impulsar la seguridad alimentaria.

En 2024, se movilizaron contribuciones extrapresupuestarias por valor de 195 millones de euros. De este monto, aproximadamente 5 millones de euros se movilizaron a través de asociados no tradicionales, lo que representa un aumento considerable con respecto a 2023. El Organismo seguirá buscando oportunidades para movilizar nuevos cauces de financiación pública y privada y ampliar alianzas, incluso con donantes no tradicionales, a fin de dotarse de mayor capacidad para ayudar a los Estados Miembros. El afán de movilizar los conocimientos e innovaciones de los asociados seguirá siendo uno de los ejes de la labor del Organismo, según corresponda.