El OIEA reúne a analistas y expertos para verificar que el material y la tecnología nucleares se utilizan únicamente con fines pacíficos. Ofrece garantías creíbles basadas en la información recopilada de las declaraciones oficiales de los Estados, las actividades de verificación sobre el terreno y otras informaciones de importancia para las salvaguardias. Una de las actividades que los inspectores del OIEA pueden realizar sobre el terreno es la toma y el análisis de muestras —principalmente material nuclear y muestras ambientales— de instalaciones nucleares y otros emplazamientos pertinentes.
Desde la década de 1970 se toman muestras de material nuclear para su contabilización. Las muestras suelen contener cantidades de uranio del tama?o de un gramo y cantidades de plutonio que van de miligramos a microgramos. Estas muestras se empaquetan en viales especiales y contenedores protectores que se sellan de forma segura y se envían al Laboratorio de Materiales Nucleares del OIEA en Seibersdorf (Austria) para su análisis. En 2021 el Organismo tomó más de 700 muestras de material nuclear.
“Un proceso riguroso y con control de calidad garantiza que, desde la toma de muestras por los inspectores del OIEA hasta el análisis en los laboratorios del Organismo y la evaluación final de los resultados en Viena, los resultados sean correctos y se extraigan las conclusiones adecuadas”, afirma Steven Balsley, Director de la Oficina de Servicios Analíticos de Salvaguardias del OIEA.
En la década de 1990 los inspectores del OIEA comenzaron a realizar muestreos ambientales, lo que resultó ser una de las herramientas más importantes para detectar materiales o actividades nucleares no declarados. Una muestra ambiental consiste en una gasa de algodón de 10 cm x 10 cm que un inspector de salvaguardias del OIEA pasa por una superficie para recoger millones de partículas diminutas de polvo. Este polvo contiene información que indica no solo la presencia de material nuclear, sino también el tipo de material (por ejemplo, plutonio separado o uranio altamente enriquecido), la edad y la presencia de otros materiales.
“Mediante el análisis de las gasas de algodón que los inspectores recogen sobre el terreno el OIEA puede detectar material nuclear con un peso inferior a la billonésima parte de un gramo”, dice Todd Mock, Analista de Información de Salvaguardias para el Muestreo Ambiental en el OIEA.
En 2021 el OIEA tomó más de 470 muestras ambientales. Alrededor del 80 % de estas fueron analizadas por 16 laboratorios externos que forman parte de la Red de Laboratorios Analíticos (RLA), y el resto se analizó en Seibersdorf en el Laboratorio de Muestras Ambientales (ESL) del OIEA. La RLA, certificada por el OIEA, está integrada por laboratorios externos en Estados Miembros del OIEA y en la Comisión Europea, que complementan la labor realizada en los propios laboratorios del OIEA en Seibersdorf.